Tuesday, October 11, 2011

Más uva y menos cáncer de mama

MES DE LA PREVENCION DEL CANCER DE SENO


Las uvas podrían prevenir el cáncer.

Las uvas podrían ayudar a mujeres a evitar las dolorosas lesiones que a 
menudo son asociadas al tratamiento contra el cáncer de mama.
Médicos del Instituto de Estudios del Cáncer de Londres creen que los
antioxidantes que se encuentran en las uvas podrían proteger contra la 
fibrosis quística. Cada año, este mal afecta a miles de mujeres en todo 
el mundo. Las lesiones o cicatrices que con frecuencia aparecen alrededor 
del pecho pueden endurecerse e incluso ser dolorosas.
Las cicatrices pueden aparecer mucho después de que la mujer se 
haya sometido a tratamiento de quimioterapia para el cáncer de mama.
En años recientes, los avances en tratamiento de radioterapia han llevado
 a un descenso en las probabilidades de que la mujer desarrolle una fibrosis 
quística. Sin embargo, la fibrosis puede aparecer y el médico no puede 
ofrecer a  la paciente garantías de que no tendrá ningún tipo de lesiones.

Rayos X del pecho de una mujer con un tumor.

Célula dañada

Hasta el momento no se ha consiguido averiguar las causas de la fibrosis
uística; no obstante, algunos médicos sospechan que éstas podrían provenir 
de la liberación de radicales libres al realizarse una radioterapia.
Los radicales libres se esparcen como un oxidante biológico y pueden
dañar las células que forman el ADN.
Los antioxidantes pueden, potencialmente, sanar las moléculas dañadas.
El doctor John Yarnold y científicos de su equipo del Instituto de Estudios del 
Cáncer estudian si las propiedades que hay en las uvas podrían desempeñar
 un papel importante. "Las semillas de las uvas contienen una mezcla de 
componentes denominados isoflavones, que también se encuentran en las 
frutas y en los vegetales", afirma el profesor Yarnold. "Tienen propiedades antioxidantes que podrían ser superiores a antioxidantes  ya conocidos 
como la vitamina E o la C.", explica John Yarnold.
Los médicos del Instituto planean emplear inicialmente a 72 pacientes. 
A la mitad de ellos se les suministrará extracto de semilla de uva, mientras 
que  la otra, recibirá una píldora sin efecto. Este experimento ayudará a los 
doctores a determinar si el extracto de semilla de uva puede proteger a 
la mujer  de fibrosis quística.

MES DE LA PREVENCION DEL CANCER DE SENO